La transición más importante que debe de hacer un líder es del YO hacia el NOSOTROS. Pero es difícil porque no nos educaron para esto.
Desde pequeños se nos recompensa por obtener un buen desempeño individual, aumentando nuestra tendencia natural al individualismo y egoísmo. Las notas del colegio, las medallas y reconocimientos, las odiosas comparaciones, etc. son elementos que van forjando en nosotros la idea de que lo único que importa es enfocarnos en nuestro crecimiento, dejando a un lado a los demás.
Al obtener una responsabilidad de liderazgo debemos de cambiar ese enfoque y entender que ya no se trata de nosotros, se trata de nuestros colaboradores, se trata de nuestros pares, se trata incluso de nuestro jefe; en fin, se trata de entender que es el crecimiento de nuestro entorno que determinará nuestro crecimiento como líder.
El resultado del líder es el resultado del equipo, y el resultado del equipo viene en función de lo que haga el líder para que el equipo y sus integrantes tengan la mejor de las condiciones para producir.
La única forma de un líder elevarse es si lo que están debajo se elevan, porque ellos son los que le empujarán hacia arriba.
Esta transición debe de llevar al líder a la conciencia de que no se trata de verse interesado ante los demás, más bien es de interesarse en los demás.
Esta es la razón por la que hago un llamado a los líderes para que abandonen esa tendencia individualista y adopten un comportamiento más de colaboración y desprendimiento.
- Preocúpate por los demás en vez de querer siempre la atención de los demás
- Desarrolla a tu equipo en vez de pretender desarrollarte tú únicamente
- Motiva a tu equipo en vez de únicamente buscar formas de mantenerte motivado
- Mueve a tu equipo en vez de trabajar de manera individual para que se valor solo tus resultados
- Crece continuamente como una manera de aportar más a tu equipo.
Veamos estos 5 llamados en más detalle.
GANATELOS.
Si quieres influenciar lo primero que debes de hacer es ganarte a las personas. Esto se hace a través de establecer una conexión genuina con ellos.
Mira que digo “conectar” y no “relacionarse”. La interacción simple puede crear relación, pero solo la preocupación genuina y desinteresada crea conexión.
Si tu colaborador sabe que primero te interesa su persona y luego su trabajo, entonces estarán dispuestos a dejarse influenciar por ti.
Si cree que no le interesas como persona, entonces solo te darán el mínimo necesario para cumplir con su trabajo, y te perderás de todo lo que ofrece aquella persona que se siente valorada: compromiso, creatividad, iniciativa, etc.
Ya no se trata de ti, se trata de ganarte su corazón antes de exigirle sus manos.
DESARRÓLLALOS.
La mayor contribución que puedes hacerle a un colaborador es traspasarle tus conocimientos y guiarle en como convertirse en un mejor profesional.
Al hacer esto le ayudas a sacar su potencial y crear un mejor futuro para él y los suyos.
Estar dispuesto a desarrollar a otros es una forma de demostrar desprendimiento, y todos quieren seguir a alguien que está dispuesto a desprenderse de lo que tiene para hacer más valioso a los que quiere.
El desarrollo va más allá de meros conocimientos técnicos (que también son necesarios), es enseñarles como comportarse ante cada situación, como tener conversaciones inteligentes, qué pasos seguir para maximizar sus acciones, etc.
Ya no se trata de ti, se trata de desprenderte de tu tiempo para desarrollar y guiar a los tuyos.
MOTIVALOS.
La motivación que provocas en tus colaboradores actúa como energía positiva que los mueve a crear, accionar y mejorar.
La motivación va acompañada también del aliento que muchas veces se necesita cuando las cosas no van tan bien como quisiéramos. Aquí el líder en vez de señalar los errores, ayuda al colaborador a identificar qué salió mal, juntos redefinen los próximos pasos y los motiva manifestándole su fe en esa persona.
Un líder es buen motivador cuando logra que los demás vean las dificultades como oportunidades.
La motivación debe de ser genuina. No se trata de decir frases bonitas pero vacías, ni de crear falsas expectativas, es más bien mostrarle las posibilidades de futuro si hacen hoy lo que les ayudará mañana.
Los colaboradores necesitan un líder que pueda ver más y más allá que ellos, y tenga la capacidad de pintarle el futuro que pudieran alcanzar si se esfuerzan y trabajan de manera comprometida.
Ya no se trata de ti, se trata de continuamente ver la necesidad de motivación en el equipo y ser un referente de optimismo, actitud positiva e inspiración.
MUEVELOS.
Este es el punto donde adquieren sentido la conexión, el desarrollo y la motivación. Todo lo que hace el líder es para conseguir resultados, y los resultados son fruto de la acción continua e inteligente.
La misión del líder es mover al equipo hacia una acción coordinada y motivada por un deseo de crear resultados que se conviertan en motivo de orgullo para el equipo.
Mover al equipo o a un colaborador en específico es lograr que accione a pesar del miedo, tomando en cuenta las prioridades, con la seguridad de que el líder estará ahí para guiar y corregir el rumbo, y ayudarle a buscar las lecciones aprendidas de los resultados obtenidos.
CRECE.
Para que puedas ser un líder actual y acorde a la necesidad de todos los tiempos, debes de procurar crecer continuamente, tanto en los aspectos técnicos de tu oficio o profesión como en tus competencias como líder.
Si te quedas atrás, lastimosamente verás como tus colaboradores te pasarán en el camino ascendente del éxito organizacional y personal.
Además, nadie quiere seguir a alguien que denota que se ha ido quedando rezagado en el tiempo.
Es motivo de orgullo y admiración para los colaboradores, ver como su líder sigue creciendo, se sigue haciendo mejor cada día, sigue cosechando nuevos éxitos, porque el liderazgo tiene un aspecto aspiracional; es decir, si mi líder pudo, yo también puedo.
Por eso debes de tener un plan de crecimiento que esté en consonancia con tus objetivos en todos los aspectos de tu vida.
Si adquieres nuevos conocimientos, forjas nuevos comportamientos y tienes mayores resultados, tendrás una legión de colaboradores dispuestos a ayudarte a crecer porque saben que lo arrastrarás con ellos en tu camino ascendente.
Ya no se trata de ti, ahora no solamente crezcas por tu conveniencia, crece porque desde ese crecimiento podrás agregar mayor valor a los tuyos.